The transcription is about the importance of prayer and faith in the face of challenges. It mentions the story of the centurion who showed great faith in Jesus, and how it relates to the Christian confession. It also discusses the current political situation in Spain and encourages positive and realistic action towards social regeneration. The message is to not let negative feelings towards politicians and the wealthy overshadow our efforts to promote the common good.
Palabra de vida hoy, lunes vigésimo cuarto del tiempo ordinario, celebrando el tiempo de la creación, al pan por la Palabra. De la primera carta de San Pablo a Timoteo. Te robo pues, lo primero de todo, que hagÔis oraciones, plegarias, súplicas, acciones de gracias, por todos los hombres, por los reyes y por todos los que estÔn al mando, para que podamos llevar una vida tranquila y apacible, con toda piedad y decoro. Eso es bueno y grato ante los ojos de nuestro Salvador, Dios, que quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad.
Del Evangelio segĆŗn San Lucas. SeƱor, no te molestes, no soy yo quien para que entres bajo mi techo, por eso tampoco me creĆ digno de venir personalmente. Dilo de palabra y mi criado quedarĆ” sano, yo tambiĆ©n vivo bajo disciplina y tengo soldados a mis órdenes, y le digo a uno ve y va, al otro ven y viene, y a mi criado hace esto y lo hace. Al oĆr esto JesĆŗs se admiró de Ć©l, y volviĆ©ndose a la gente que lo seguĆa dijo, os digo que ni en Israel he encontrado tanta fe.
Apuradito te veas para que creas, o dicho con otro refrĆ”n mĆ”s amable para este caso, sabidurĆa es saber hacer de la necesidad virtud. Muy apuradito se vio el centurión del Evangelio de hoy ante la inminente muerte de uno de sus siervos mĆ”s queridos, tanto como para, ante quien todos reconocĆan como un prodigioso sanador, dar un paso firme y muy largo mĆ”s allĆ”, y reconocerlo como mucho mĆ”s al llamarlo SeƱor. Kirios, una palabra recedible sólo a Dios.
El seƱorĆo que el centurión le reconoce a JesĆŗs con las palabras que siguen a su confesión, la refuerzan e identifican. De ahĆ la loa que JesĆŗs le dirige, sorprendiĆ©ndose por semejante salto de fe en alguien ajeno al pueblo de Dios. Un salto de fe que perseguimos los cristianos al hacer nuestra su confesión tras la triple aclamación del Cordeo de Dios en cada celebración de la Misa. Mirando ahora la primera lectura y al panorama polĆtico que tenemos en nuestro paĆs, bien podemos empatizar con los sentimientos aforados de los cristianos destinatarios del mensaje de la primera carta de San Pablo a Timoteo en la Roma del siglo I.
Realmente no creo que en EspaƱa hoy podamos ser muy optimistas, y por ello, acogiendo el mensaje de la primera lectura, hemos de ser positivamente realistas. Con un salto de fe como el del centurión, que tenga la seguridad de que recurriendo al SeƱor de una forma renovada, vital y con una vida mĆ”s comprometida y coherente, Ćl sabrĆ” propiciar los modos y caminos con nosotros como mediación para reconducirlo todo de modo que la degradación social dĆ© paso a una regeneración polĆtica que optimice la gestión de la economĆa y devuelva a cauces de racionalidad las polĆticas laborales y sociales hoy tan enloquecidas y deshumanizadas.
Nunca dejemos que sentimientos aviesos y furiosos hacia la clase polĆtica, los gobernantes de cualquier signo o hacia los oligarcas mĆ”s enriquecidos hagan presa en nosotros. DediquĆ©monos, como ciudadanos, a hacer todo lo que estĆ© en nuestra mano para crecer el bien comĆŗn, mientras rezamos por quienes deberĆan hacerlo primero de todos y, sin embargo, se dedican a conseguir mayores cotas de poder y beneficio y de sus atlĆ”teres. Con deseos de humilde conversión y con voluntad de no juzgar nunca a nadie, vuestros hermanos menores desde Toredo os abrazan con la paz y el bien.