The speaker introduces themselves and their guests, who are students studying Christian Education. They discuss a book called "Un ser de mediaciones de la AntropologĂa de la ComunicaciĂłn" which explores the importance of language and communication in anthropology. They also discuss the concept of the narrative of life, highlighting how humans can understand and communicate through various means, not just language. They emphasize the role of storytelling in constructing individual and collective identities. They conclude by discussing the importance of both internal and external knowledge and understanding.
Hola, muy buen dĂa para todos. Le saluda su amigo y anfitriĂłn Edgar Franco. Tenemos como invitado al compañero Itay MartĂnez, y tenemos como productora la compañera Alba Paredes. Somos estudiantes de la carrera de Licenciatura en EducaciĂłn Cristiana de la Facultad de TeologĂa de la Universidad Mariano GĂĄlvez de Guatemala. Queremos presentar un breve aporte y anĂĄlisis a uno de los temas del libro Un ser de mediaciones de la AntropologĂa de la ComunicaciĂłn, el cual es una obra de los autores Luis Duetsch y Albert Chillon.
Como introducciĂłn queremos mencionar lo que expresa Carmen Gaona Pisonero de la Universidad Juan Carlos de España al respecto de esta obra. Desde una nĂtida Ăłptica antropolĂłgica, Luis Duetsch y Albert Chillon desembrean los mĂșsculos primas del lenguaje desde un principio ineludible para el ĂĄntropos. No hay posibilidad extracultural ni posibilidad de ser fuera del lenguaje. El ĂĄntropos precisa mediaciones de forma imperiosa, ya que su condiciĂłn conlleva una insuperable distancia respecto de sĂ, del mundo y de los demĂĄs.
Distancia desde la que se nutre la precariedad en que vivimos los sujetos y que puede ser diluida desde las enosis, el lenguaje y el sĂmbolo, compartiendo todos ellos ser indiscernibles de la humanidad. Toda comunicaciĂłn deja nexos entre los sujetos implicados, entre la precariedad en que viven y su posible superaciĂłn. PĂĄgina 24 de esta obra. Queremos tambiĂ©n aportar, dar una explicaciĂłn, compartir algo de lo que podemos comprender de esta obra, de un tema muy interesante que se titula la narrativa del vivir.
Este tema estĂĄ dentro de esta obra. La narrativa del vivir es parte del ser, parte del vivir de la persona humana, en cĂłmo cada uno de nosotros podemos comprendernos a nosotros mismos y comprender a los demĂĄs, sin quizĂĄ usar el lenguaje, o puede ser usĂĄndolo. Los seres humanos tenemos esa bendiciĂłn del Creador, que nos ha formado como una inteligencia poderosa y sorprendente, que hay una capacidad intelectual por medio de la cual se pueden describir muchas cosas que son afines para el ĂĄntropos.
Se forma una historia en el dĂa a dĂa, donde la mente trabaja y el uso de señas, sĂmbolos o signos, incluso los ruidos, pueden ser captados y conocer los significados, sin la necesidad quizĂĄs de contemplar de manera visual o palpable. El espĂritu del hombre tiene esa capacidad de entender y percibir los movimientos y señales de su entorno, como tambiĂ©n hacer expresivas, o mĂĄs bien dicho narrativas, esas sensaciones que otros no pueden, pero a travĂ©s de esa intuiciĂłn y percepciĂłn podemos describir sucesos que muchas veces llegan a efectuarse en la vida real.
Por otro lado, tambiĂ©n tenemos como tal que a travĂ©s de la narrativa y uso constante de los signos expresivos de comunicaciĂłn, el ĂĄntropo se construye como ser humano, en virtud de una dialĂ©ctica sin fin. En cambio, las mĂșltiples identidades se construyen en comĂșn, tanto a sĂ mismas como recĂprocamente. ÂżEs necesaria la interrelaciĂłn social para armar la construcciĂłn de identidad individual? Dejamos en el uso de la palabra a nuestro invitado Itay MartĂnez. Ăl nos brinda tambiĂ©n su aporte relacionado a lo que es esta obra.
En cuanto a la comprensiĂłn narrativa del vivir, la funciĂłn primordial de la narraciĂłn radica en comprender el ser y el lograr del ser, o es decir, el ser humano, esa conjugaciĂłn de detalles y matices que distinguen una vida, que es mĂĄs allĂĄ de lo exclusivo. MĂĄs sin embargo, siempre se da la exclusiĂłn. Porque el tenor del comprender es prescientĂfico, es algo que se va tejiendo a lo largo de la vida. Es una comprensiĂłn innata, podrĂamos decirlo asĂ.
Es un rasgo distintivo del mundo de los vivientes. Es propio del ser, es innato. Lo que la comprensiĂłn comĂșn da a conocer es un acaecer interior que Ă©ste debe descifrar de manera mediata, porque no es inmediata, sin reproducirlo, dado que es incapaz de hacerlo de manera pronta. Sea el acontecer interior del narrador, sea el de los prĂłjimos, posibles de ser narrados, siempre se halla en juego la comprensiĂłn de uno u otros mediante su representaciĂłn en signos y sĂmbolos compartidos.
AdemĂĄs de tener que interpretar a los demĂĄs partiendo de los signos que emanan, el sujeto debe tambiĂ©n estar o hacerlo propio consigo para reconocerse y cultivar su identidad. Ese Ăntimo personaje que por lo general tenderĂĄ a definir a base de tautologĂas, como por ejemplo, yo soy yo. Todo esto implica entonces lo que lo propio y lo ajeno comparecen como una masa textual que carece de sentido en sĂ. Por eso no hay mĂĄs remedio que conferĂrselo por una vĂa hermenĂ©utica, o es decir, una interpretaciĂłn que debe hacersele a esa comprensiĂłn propia de los individuos.
AsĂ pues, llamamos comprender al proceso en el cual, a partir de unos sismos dados de manera sensible, conocemos algo de lo cual es lo psĂquico, de lo cual son su manifestaciĂłn propia del ser humano. Ese comprender abarca desde el palpuseo de un niño hasta aquello a lo cual se le llama crĂtica de la razĂłn. Todo ello es un mar o un inmenso ocĂ©ano de conocimientos, pero puntualizamos aquĂ en algo que es propio del ser humano. Eso que estĂĄ dentro de esa naturaleza biolĂłgica, dentro de esa composiciĂłn de masa y espĂritu de ese ser.
Ese conocimiento, esa comprensiĂłn pura, intangible y a la vez bruta, podrĂamos decirle, porque es algo que no estĂĄ pulido, sino que es algo que reluce propiamente de eso nato del ser humano. Bien, es interesante la aportaciĂłn que nos hace el compañero Itay MartĂnez. Queremos dejar en el uso de la palabra a la compañera Alma Paredes, que llega con nosotros. Como conclusiĂłn del tema, podemos hablar que el mismo EspĂritu Humano nos habla a nosotros desde piedras, mĂĄrmol, tonos musicalmente formados, gestos, palabras y la Escritura, desde las acciones, las constituciones y las organizaciones econĂłmicas.
El ser humano se va construyendo de conocimientos de todo lo que nos rodea, de todos los conocimientos transmitidos y influencias, y va desarrollando por medio de los sentidos. Pero antes del concepto cientĂfico natural de esa eternidad real, estĂĄ ese interior, ese devenir fĂsico que cada quien siente como lo real, lo Ăntimo e inmediato, corriente de sensaciones que muebla su mente, el conocimiento innato, lo puro, lo que estĂĄ en el ser humano, lo que estĂĄ en el ser humano antes de conocer el conocimiento cientĂfico, sea la educaciĂłn formal, la universidad, cualquier conocimiento recibido.
No hay censura cualitativa entre ambas modalidades fenoménicas, la interna y la externa. La primera es el modo primario y bruto, la segunda posee un tenor extracortóreo y hasta un punto ajeno. Lo bruto podemos referirlo a lo innato, a lo que reluce de manera no académica, lo natural, el conocimiento espontåneo que se da. Lo extracortóreo es lo que estå afuera, todo lo que se percibe en el medio, todo lo que podemos recibir. Bien, agradecemos a la compañera Alma Paredes por esta aportación que ha hecho a este tema.
Es asĂ como de esta forma pues hemos traĂdo esta exposiciĂłn relacionada al tema de la narrativa del vivir. Esperamos que sea de bendiciĂłn. Dios los bendiga. Chao.